Cómo dejar correr las ganancias

Dejar correr las ganancias cuando se hace trading es quizá la parte más difícil de la operativa intradía. Tener la disciplina necesaria para no cerrar una operación positiva y ver como cada vez se van reduciendo nuestros beneficios requiere una fortaleza mental muy fuerte que sólo se consigue después de mucha práctica. En este post veremos las tres alternativas que tenemos a la hora de gestionar monetariamente nuestra cuenta.

Dejar correr las ganancias

Una vez tenemos una operación abierta y está en positivo tenemos tres alternativas.

1) Mantener el stop loss y stop profit fijos y dejar que el precio toque uno u otro.

Este tipo de operativa tiene como aspecto positivo que si aplicamos una gestión monetaria estricta siempre sabremos lo que ganaremos y lo que perderemos (por ejemplo el 1% o 2% de nuestro capital). La parte negativa de esta estrategia es que nunca podremos dejar correr los beneficios ya que cerraremos al llegar a nuestro objetivo. Para que esta manera de gestionar sea rentable tendremos que tener un % de acierto con nuestro sistema cercano al 75%.

2) Mover el stop “a no perder” y esperar que el precio toque el objetivo de beneficios o bien el stop loss y quedarnos a cero.

Con este sistema de gestión quizá conseguimos reducir las pérdidas pero tenemos que estar dispuestos a realizar muchas operaciones con beneficio 0. Una vez estamos dentro del mercado y va a nuestro favor, moveremos el stop loss al precio de entrada con el objetivo de llegar a nuestro stop profit. Operando de esta manera reduciremos nuestras pérdidas pero nunca conseguiremos unos beneficios constantes y jamás dejaremos correr los beneficios. Alternativa nada recomendable.

3) Liquidar una parte de nuestra posición al tocar el primer objetivo, protegernos con la parte pendiente y dejar correr el resto aplicando la teoría de Dow.

Esta tercera manera de gestionar las operaciones es la mejor de todas. Se trata de entrar en el mercado y automáticamente situar un stop loss y un stop profit. El stop lo mantendremos en el precio inicial y sólo lo moveremos cuando el mercado haya tocado nuestro precio objetivo. Una vez la cotización del activo esté en el precio objetivo liquidaremos una parte (70/80% de la posición) y colocaremos el stop loss sobre la parte restante al precio de entrada para no perder. El resto de la posición (30/20%) la mantendremos hasta que nos haga saltar el stop loss, el cual iremos moviendo progresivamente aplicando la Teoría de Dow situándolo en el último mínimo o máximo, respectivamente.

Operando de esta manera lo que estamos haciendo es recoger una parte importante de nuestros beneficios, esto nos permite mantener la mente clara y ganar en confianza para dejar correr las ganancias.

A continuación os dejo un gráfico en el que se pueden ver todos los pasos descritos en este método de gestionar con el objetivo de dejar correr las ganancias.

Dejar correr las ganancias

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